18 de outubro de 2009

Veranillo de San Martín


No me vueles la venda de los ojos,
ni hagas algo que se pueda parecer,
no me mientas, no me pidas antojos;
hay mil cosas que pretendo conocer.

Si a noviembre sobrevive el calor,
dime qué has venido a hacer aquí,
si sólo de verano fuiste amor,
llegaste al veranillo de San Martín.

Ahora que contamos amigos por candelabros
y a los novios anotamos en cajas B,
ahora que te desnudo con vocablos,
ahora, que todo parece ir bien.